Furioso ataque de un hombre al altar principal de la Basílica de San Pedro


ROMA.- Un extraño episodio se vivió este viernes en la Basílica de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano, cuando un hombre que llevaba una mochila, de pronto, sorteando la seguridad, atacó el altar principal de la iglesia, que se encuentra debajo del famoso Baldaquino de Bernini recién restaurado.

Desde allí, como enfurecido, empezó a patear y tirar al piso dos antiguos candelabros dorados, uno después del otro. En medio del estruendo de las piezas que caían al suelo y los murmullos de turistas y peregrinos azorados, el hombre, de campera celeste y determinado a seguir profanando el lugar: se agachó y comenzó a arrancar el mantel blanco con encaje que recubre el altar de mármol, también arrojándolo con violencia al suelo.

En ese momento, se acercaron unos gendarmes vaticanos que lograron reducirlo.

Actos de vandalismo en El Vaticano

Según la agencia ANSA, el vándalo fue identificado como un ciudadano originario de Rumania y se presentaron cargos contra él por dañar seis candelabros del siglo XIX de un valor aproximado de 30.000 euros cada uno.

El episodio desconcertante, ocurrido en medio del Jubileo de la Esperanza, que durará todo el año y atraerá a Roma más de 32 millones de peregrinos, generó interrogantes acerca de las medidas de seguridad que hay en la Basílica de San Pedro.

Debido a este Jubileo, que fue inaugurado el 24 de diciembre pasado por el papa Francisco y durará hasta el 6 de enero de 2026, en la zona del Vaticano ha sido fuertemente reforzada la vigilancia y se ven muchos más agentes de la policía que de costumbre.

De hecho, para ingresar a la Basílica de San Pedro, que es meta de peregrinos que llegan de todo el mundo que quieren cruzar la Puerta Santa del templo para obtener el perdón y la indulgencia plenaria, antes se deben sortear controles y pasar por detectores de metales. Estas medidas evidentemente no impiden que puedan suceder incidentes como el de esta tarde, que se conoció debido a algunos videos que aparecieron en redes sociales y sobre el que el Vaticano aún no dio precisiones.

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