Los Cavigliasso, con las emociones contenidas ante el último paso a la gloria en el Rally Dakar 2025

La noche se ve como en ningún otro lugar. El desierto invita a mirar hacia arriba, para contemplar la luna y las estrellas, que parecen contar con más brillo frente a la inmensidad de la arena. Una cúpula estrellada parece estar en sintonía con ese mar de dunas que componen de este sitio algo tan mágico como único.

Es el célebre “Empty Quarter”, el “Cuarto Vacío” de Arabia Saudita, que posee unos 430.000 kilómetros cuadrados. Casi como si fuese la provincia de Buenos Aires y parte de La Pampa todo lleno de arena.

Aquí en el medio de este mar amarillo está el Dakar, cerrando la competencia en un sitio que parece darle otro brillo a la exigencia natural que posee esta prueba.

Un competidor en el “Empty Quarter”. (AFP)

Y aquí, donde internet se consigue de a cuentagotas y se emplazó esta ciudad itinerante de casi 3000 habitantes, la mítica competencia pondrá punto final.

Por eso la penúltima etapa, que también se desarrolló aquí con un sistema de “rulo”, con largada y llegada en este bivouac, se la tomó como definitoria en la mayoría de las categorías.

Hay una tripulación argentina que mientras las estrellas brillaban, recién llegaban al campamento. Ellos son los Cavigliasso, el matrimonio compuesto por Nicolás, piloto, y Valentina, navegante, que recibieron el cálido aplauso del equipo al arribar tarde, pero con la satisfacción de aumentar su agigantada ventaja en el clasificador general.

Nicolás Cavigliasso junto a su esposa y campeona mundial Valentina PertegariniNicolás Cavigliasso junto a su esposa y campeona mundial Valentina Pertegarini

Una verdadera catástrofe debiera suceder este viernes en la jornada final para que los representantes de la ciudad cordobesa de General Cabrera se queden con las manos vacías. Al andar sólido de los argentinos, se agregó el retraso del portugués Gonçalo Guerreiro, que estaba a media hora y con problemas de temperatura padecían detenciones en las dunas.

“No digo nada. hay que esperar a cumplir con todas las etapas. Por ahora venimos muy bien”, afirmaba Nicolás a Clarín no bien se bajó de su Taurus, apelando a la cábala de no decir nada del gran objetivo que tiene a la vuelta de la esquina: transformarse nuevamente en un ganador del Dakar.

Es que Cavigliasso ya conoce esto de ganar la carrera más extrema del planeta. Lo hizo en 2019, cuando el Dakar cerró en Perú. Allí Nico se consagraba en cuatriciclos. Por aquel entonces contaba con la amorosa asistencia de su novia, Valentina, que le marcaba con los colores la hoja de ruta que ajustaba en su cuatriciclo.

Cuando Nicolás subió al escenario, le pidió la mano a su novia y se declaró delante de todo el mundo. Entonces se casaron y convivieron también arriba de los autos, ya que ella pasó a ser su navegante.

El momento en que Nicolás le pide casamiento a su novia Valentina, en el cierre del Dakar de 2019, en Perú. (EFE)El momento en que Nicolás le pide casamiento a su novia Valentina, en el cierre del Dakar de 2019, en Perú. (EFE)

Compiten desde 2021, Valentina en 2024 se consagró campeona mundial entre navegantes de Cross Country y ahora están a una sola etapa de conquistar el Dakar 2025.

“Hoy fue una mezcla de emociones durante todo el día. Salimos a controlar la carrera, no a acelerar. Y en un momento encontramos a nuestro rival Guerreiro en el medio de las dunas con problemas de temperatura. Le dimos nuestro bidón de agua, unos cinco litros, y seguimos adelante”, confesó Valentina.

Nadie quiere decir nada. Sólo a esperar la última etapa, que será muy cortita, de apenas 132 kilómetros de los cuales 62 serán de prueba especial. En ese puñado de kilómetros se emularán aquellas llegadas frente al Lago Rosa, en Senegal, frente a la ciudad de Dakar, cuando era la imagen del triunfo al llegar a esa particular geografía africana.

Para el resto de las categorías, sucede algo similar. En motos, el australiano Daniel Sanders, de KTM, tiene una ventaja de 9 minutos por sobre el español Tosha Schareina (Honda), de 15 minutos sobre el francés Adrien Van Beveren y de 28 minutos por sobre el argentino Luciano Benavides.

En autos, en Ultimate, el piloto local Al Rajhi le lleva 6 minutos al sudafricano Henk Lategan, ambos con Toyota. Más retrasados vienen Mattias Ekstrom (Ford) y el qatarí Nasser Al Attiyah (Dacia). El argentino Juan Cruz Yacopini se mantiene en el séptimo lugar.

El Dakar 2025 llega a su fin. En un lugar que se rodea de misterio, frente al imponente desierto del Empty Quarter, el matrimonio cavigliasso sueña bajo la noche estrellada, para brillar con la misma intensidad que lo hace el sol frente a este mar de arena.

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