El costado futbolero de Flavio Briatore, el nuevo jefe de Franco Colapinto: obsesión por Juventus, por qué casi preside Napoli y su aventura “mata-DTs” en Premier

Sólo los que corren pueden“, dice “Historia de un gran amor”, el himno de la Juventus en su primera estrofa. La letra es tarareada por Flavio Briatore, el empresario italiano que maneja la escudería francesa de Fórmula 1 Alpine, que contrató hace una semana al piloto argentino Franco Colapinto.

Nació el 12 de abril de 1950 en Cúneo, una ciudad de casi 60 mil habitantes a 100 kilómetros de Turín, casa de la poderosa Juventus, la poderosa Vecchia Signora en la Serie A del fútbol italiano. Empresario de estrategias agresivas, fue primero instructor de esquí y gerente en un restaurante.

Su camino hacia los grandes negocios y los millones comenzó cuando conoció a Luciano Benetton, fundador de la marca de ropa, con quien trabajó para expandirla a América a fines de la década del ’70. Padre de una adolescente con la ex supermodelo Heidi Klum, fue vinculado amorosamente también a Naomi Campbell. Pero su historia de un gran amor comenzó en su niñez y fue con el más importante de los equipos de Turín.

El “blanco que abraza al negro”, como recita el himno, lo cautivó desde el comienzo y hasta llegó a decir que nació para ser jugador de la Juventus. Lo hizo en un evento en el que también estaba Adriano Galliani, hoy mandamás del club Monza, que supo ser un encumbrado dirigente del Milan de Silvio Berlusconi y senador nacional.

Briatore junto a Berusconi en el estadio del Milan. Foto AP

“Corro el riesgo de morir rossoneri”, bromeó Briatore sobre la camiseta del Milan, a lo que Galliani respondió a modo de chiste: “Lo acerco cada vez más a nuestros colores”, a sabiendas de que se trataba de una misión imposible.

Para Briatore, sin embargo, lo imposible no lo es tanto. Llevó a Michael Schumacher y a Fernando Alonso a la cima de la máxima categoría del automovilismo y fue quien vio, a menos de un año de haber llegado a Alpine, en Colapinto a alguien con capacidad y talento para tener su butaca “durante 15 años”. “Es un súper piloto”, dijo sobre el nacido en Pilar, provincia de Buenos Aires.

Disfrutó como cada juventino de los 9 títulos de liga consecutivos entre la temporada 2011/12 y la 2019/20 y hasta se fotografió con Massimiliano Allegri, ex DT del equipo, en Montecarlo, durante unas vacaciones un par de años después del reinado blanco y negro en Italia.

La Vecchia Signora es controlada por la familia Agnelli desde hace casi un siglo y Andrea estuvo a cargo 2010 hasta 2022. A la hora de que ruede la pelota, Briatore y el empresario de la dinastía, compartían alegrías y tristezas por triunfos y derrotas de Andrea Pirlo, Cristiano Ronaldo y tantos otros.

Sin embargo, en el mundo del automovilismo, si bien se cruzaban en boxes, eran adversarios, ya que los Agnelli, además de su vínculo con Fiat, también tenían participación en Ferrari, escudería que intentó contratarlo. “La primera vez fue entre el ’94 y el ’95. “Hablé seriamente con Umberto Agnelli, pero estaba demasiado ocupado con Benetton”, dijo en una entrevista a Autosprint.

Entre tanto éxito y lujo que caracteriza al norte italiano, Briatore también sabe diferenciarse y se mostró capaz de elogiar al Napoli, archirrival de su equipo desde la llegada de Diego Maradona en 1984 y equipo icónico de la “Italia pobre”, a la que, según el argentino, los del norte calificaban despectivamente como “africanos”.

“Yo soy fanático de la Juventus desde que era niño. Mi hijo es fanático del Milán y nunca entendí por qué cuando el Napoli ganó el Scudetto todos estábamos felices. La ciudad se lo merece”, dijo en septiembre de 2024 durante una entrevista a Radio Goal.

El costado futbolero de Flavio Briatore, el nuevo jefe de Franco Colapinto: su relación con los argentinos, el fanatismo por la Juventus y la aventura en un club inglés. Foto EFE
El costado futbolero de Flavio Briatore, el nuevo jefe de Franco Colapinto: su relación con los argentinos, el fanatismo por la Juventus y la aventura en un club inglés. Foto EFE

Inter, Milan y Napoli dominaron la Serie A y la Juventus perdió su reinado. Desde hace décadas intenta pisar fuerte a nivel continental, como lo hizo en 1985 y 1996, cuando ganó la ahora conocida como Champions League. La entonces llamada Copa de Campeones le dio el pasaje para derrotar a dos equipos argentinos en la Copa Intercontinental: Argentinos Juniors y River. Michel Platini y Alessandro Del Piero fueron los héroes en esas gestas que nunca más pudo repetir.

Entonces, en 2018 a Briatore le preguntaron qué necesita la Juventus para instalarse en la élite del fútbol mundial. “Medio millardo”, sentenció Briatore. Para el magnate italiano, esos 500 millones de euros ubicarían a la Juventus al nivel del Real Madrid, Bayern Múnich o Barcelona.

“Están en otra categoría, luego vienen los demás”, dijo en invitado de “La Politica nel Pallone” en el Parlamento Europeo y reprodujo TuttoSport.

Y añadió: “Es sólo una cuestión de presupuesto, es como cuando te falta la mitad de un segundo en la Fórmula 1: recuperar un segundo está bien, dos décimas requieren dinero y pilotos”.

En la temporada 2006/07, inmediatamente después de que Italia ganara el Mundial en Alemania, la Juventus debió jugar la Serie B y fue despojada de sus títulos en las temporadas 2004/05 y 2005/06. Fue tras conocerse pruebas de que los clubes elegían árbitros favorables para sus propios partidos en un caso conocido como “Calciopoli”. Incluso allí, Briatore tarareó: “Llévanos donde quieras. Somos una hinchada de fiesta”.

Flavio Briatore y los argentinos: Tevez, Higuaín y Messi

El hombre fuerte de Alpine, la escudería que contrató a Franco Colapinto, no se suma a viejas rivalidades y deja banderas de lado a la hora de soltar elogios o críticas.

“Lo hablé con Corrado Ferlaino, con el alcalde que era Antonio Bassolino. No vine porque tenía un compromiso completo con la Fórmula 1 y no habría tenido tiempo, pero el proyecto era muy emocionante”, confesó Briatore sobre los días en los que pudo haber manejado al equipo que supo adorar y odiar, además de a Maradona, a Gonzalo Higuaín.

El “Pipa” dejó Napoli para jugar en la Juventus, pero para Briatore, en 2015, el ex River y selección argentina era pieza clave en el equipo sureño cuando peleaba el título con su amada Juventus. “Podría tener problemas si lo pierde”. Se refería a una posible ausencia circunstancial. A la temporada siguiente, pasaría a ser definitiva.

“Tevez, gran compra”, publicó Briatore en su cuenta de X el 27 de junio de 2013, luego de que Juventus se lo pagara 10 millones euros al Manchester City. Ese mismo año, Higuaín firmó para Napoli y en la misma plataforma, pero el 20 de agosto, expresó sus “mejores deseos” para el “nuevo gran fichaje” del conjunto sureño.

El 1 de julio de 2014, tras la agónica victoria de Argentina sobre Suiza en San Pablo por los octavos de final de la Copa del Mundo, Briatore no dudó en opinar sobre el partido: “Final apasionante…Argentina un poco afortunada”.

Briatore no necesitó que Lionel se consagrara campeón de América o del Mundo con la Selección para rendirse a sus pies. El 2 de abril de 2013, tras un 2 a 2 entre Paris Saint Germain y Barcelona, el fanático juventino escribió en redes sociales: “Messi no hay palabras, es solo Messi… nadie como él…”.

La aventura del jefe de Colapinto en el fútbol inglés: compra bajo sospecha y ascenso con suspenso

El Queens Park Rangers está hace 10 años en el Championship, la segunda categoría del fútbol inglés. Solamente en la temporada 1966/67 gritó campeón ante la mirada de los “Big Six”, los grandes del país inventor del fútbol. Fue en la Copa de la Liga.

En 2007, apenas a minutos de que la Federación Inglesa bajase el martillo para declarar la quiebra del QPR, apareció Briatore. Junto al ex mandamás de la F1, Bernie Ecclestone, concretaron la compra del club fundado en 1882.

En el accionariado entraron también el indio Lakshmi Mittal —una de las mayores fortunas del mundo gracias a su imperio en el sector del acero— y el empresario español Alejandro Agag, yerno del ex presidente José María Aznar, recordó una crónica del diario Marca.

La operación involucró también a una firma offshore registrada en Islas Vírgenes Británicas, llamada Sarita Capital Investment. Desembolsaron 28,2 millones de dólares.

Ecclestone dijo sobre la compra que le había hecho “un favor a Briatore” y que su nombre se utilizó principalmente para atraer a otros inversores y gestores.

Añadió que Briatore y otros inversores eran más optimistas sobre las perspectivas deportivas del club. “Yo era el único que no estaba particularmente entusiasmado, porque soy realista”, dijo el ex hombre fuerte de la Fórmula 1.

Tras una larga lista de frustraciones deportivas y cambios de entrenadores, Briatore dejó su cargo como presidente del club en 2010.

“Ya fui demasiado paciente con los entrenadores. Cada uno tiene una manera diferente. Cambié algunos entrenadores porque nunca vi a nadie lo suficientemente bueno para hacer el trabajo. Así de simple”, declaró, consignó The Athletic, con la misma agresividad con la que se distinguió en el mundo empresarial.

Flavio Briatore y Bernie Ecclestone en la tribuna, en un partido de Queens Park Ranger y Sheffield United. Foto AFPFlavio Briatore y Bernie Ecclestone en la tribuna, en un partido de Queens Park Ranger y Sheffield United. Foto AFP

A pesar de la suculenta chequera que habían puesto a disposición del equipo, el objetivo de retornarlo a la Premier League no se concretó.

Sin embargo, en 2011, con el argentino Alejandro Faurlín en sus filas, le ganó de visitante al Watford y aseguró matemáticamente el tan soñado ascenso a la máxima categoría del fútbol inglés.

A pesar de los festejos a la distancia en el Loftus Road, el logro estuvo a punto de caerse, ya que la federación del país investigó justamente la contratación del ex mediocampista de Instituto de Córdoba. En caso de demostrarse una serie de irregularidades, al equipo se le descontarían puntos y resignaría su lugar en el campeonato junto a Liverpool y Manchester United, entre otros.

Se demostraron apenas dos de los siete cargos y el QPR solamente recibió una sanción económica. Resuelto el conflicto, sin embargo, Briatore y Ecclestone dieron por finalizada su aventura y vendieron el paquete accionario.

El comprador fue una empresa ubicada en el paraíso fiscal de Jersey, llamada Exelixi Ltd. La operación desembocó en investigaciones por corrupción a cargo del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación.

Para el QPR, la historia post Briatore continuó con el descenso al Championship en la 2012/13. Un año logró regresar a la Premier, pero la estadía, nuevamente, duró tan sólo una temporada. Desde entonces pelea por volver a codearse con las estrellas y volver a cantarles su himno que reza “ahora que has visto mi regreso”.

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