El Papa se recupera lentamente de su bronquitis y otra vez llama a frenar las guerras
Favorecido visiblemente por dos días de reposo en la Casa de Santa Marta, el hotel vaticano donde se aloja, el Papa se recuperó en parte del ataque de bronquitis que impresionó a la multitud de 30 mil militares que lo escuchó y vio el domingo en la plaza de San Pedro.
La audiencia general de los miércoles fue trasladada esta semana para reparar al pontífice argentino de los fríos y los vientos del invierno romano y Francisco intervino varias veces, pero sin leer la catequesis, el discurso más largo, que pasó a un ayudante en la gran sala de las audiencias generales, repleta de fieles que lo aclamaban con entusiasmo.
En los saludos en varias lenguas, el Papa habló personalmente a los fieles de lengua española e italiana.
A fines de la audencia general volvió a lanzar su llamado a que los fieles hagan “de todo” para que cesen violencias y conflictos.
Pidió a los católicos de todo el mundo rezar por la paz y “hacer penitencia por la paz”.
Sin tos, pero todavía frágil
Francisco durante toda la audiencia se sentía llamado por la multitud en la gigantesca sala de audiencias y devolvió los saludos con ambos manos. No se lo vio toser en ningún momento.
El domingo había sufrido debido a la bronquitis un “hambre de aire” que lo obligó a renunciar a la lectura de la homilía que estaba leyendo a treinta mil militares de todo el mundo reunidos en la plaza de San Pedro.
En el llamado final de la audiencia de este miércoles, el Papa leyó con voz firme su mensaje de paz. “No hemos nacido para matar sino para hacer crecer a los pueblos para que encuentren los caminos de paz”.
Francisco dijo que en el mundo de hoy “aparecen siempre más frágiles treguas y negociaciones y la única certidumbre para ser el ruido de las armas”.
“Hermanos, hermanas. Oremos por la paz, hagamos todo por la paz. No olvidemos que la guerra es una derrota, siempre”, remarcó.
“Pienso a tantos países que están en guerra. Hermanos, hermanas, oremos por la paz, hagamos todo por la paz”, prosiguió Francisco.
El Papa evocó como hace siempre los países castigados. “La martirizada Ucrainia…¡Cuánto sufre!”. Hizo una pausa y agregó. “Piensen en Palestina e Israel, en Myamar, el Nord Kiwu, Sudan del Sur ¡Tantos países en guerra”. Francisco considera que tantos conflictos demuestran que está en curso “una guerra mundial por pedazos”.
![La salud del Papa Francisco, de 88 años, vuelve a encender alarmas en el Vaticano. Foto: REUTERS](https://www.clarin.com/img/2025/02/12/XkGaT6Bly_720x0__1.jpg)
Jorge Bergolio pidió: “Hagamos peitencia por la paz”.
Respirándo con dificultad debido a la bronquitis , el Papa dijo durante el saludo a los fieles, que pidan a Dios mantener el corazón de cada uno “humilde y abierto” para escuchar “el grito de nuestros hermanos” y “saber recoocer su presencia en las debilidades y en las heridas del mundo”.
A los peregrinos polacos les lanzó un llamado “a ver a Jesús en quién que lucha en el abandono y en las circunstancias difíciles.”
El buen resultado del descansado del lunes y martes que le permitió prepararse fisicamente para la audiencia general de este miércoles en un espacio cerrado al reparo del invierno romano, demuestra que el exceso de trabajo es el peor adversario para el anciano pontífice de 88 años.
En 2023 debió ser internado tres días por un ataque de bronquitis. Desde entonces, puntualmente todos los inviernos se repiten los problemas, agravados por la edad y los achaques.
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