Meloni desafía un fallo de los “jueces comunistas” que había generado una tormenta política en Italia


ROMA.- Giorgia Meloni cumple este martes dos años en el poder inmersa en un duro choque con el Poder Judicial, que le puso un freno a su modelo Albania de gestión de migrantes, pero más resuelta que nunca en seguir adelante con esa novedosa y cuestionada iniciativa. De hecho, esta tarde su gobierno aprobó en minutos un decreto ley para superar los escollos de la magistratura a estos cuestionados centros de repatriación de extranjeros recién inaugurados en Albania.

“Mientras tengamos el apoyo de los ciudadanos, seguiremos trabajando con determinación, con la frente en alto, para lograr nuestro programa y ayudar a Italia a crecer, ser fuerte, creíble y respetada”, aseguró poco antes Meloni.

“Se lo debemos a los italianos, a quienes nos eligieron y a quienes, a pesar de no habernos votado, esperan que hagamos bien nuestro trabajo. A trabajar, sin parar, sin miedo”, agregó, en un posteo en X en vísperas de cumplir su segundo aniversario en Palazzo Chigi.

Meloni, de 47 años, comenzó su mandato el 22 de octubre de 2022, después de que Hermanos de Italia, su partido de derecha post-fascista arrasó en las elecciones de septiembre del mismo año. Entonces, hizo historia al convertirse en la primera mujer que llega al gobierno en Italia, al frente de una alianza con Forza Italia, el partido del fallecido expremier, Silvio Berlusconi y con la xenófoba Liga del hoy vicepremier y ministro de Transporte, Matteo Salvini.

Meloni cumple sus dos años en el poder inmersa en un enfrentamiento con “los jueces comunistas” que recuerda los que tuvo en su momento su exsocio, Berlusconi, magnate que, como es sabido, decidió meterse en política justamente para salvarse de sus problemas judiciales y que solía lamentar ser perseguido por las “togas rojas”.

Compacta, la coalición de derecha de Meloni reaccionó exactamente con la misma narrativa y retórica el viernes pasado, después de que un tribunal de Roma bloqueó los primeros traslados de migrantes a los recién inaugurados centros de repatriación de Albania. El tribunal revocó el traslado tras considerar, en base a una sentencia de la Corte de Justicia Europea, que no provenían de países considerados seguros (Egipto y Bangladesh). Al dictaminar que los primeros 12 migrantes recién llegados a Albania debían volver de inmediato a Italia (cosa que ocurrió el sábado), el fallo del tribunal romano causó una verdadera tormenta. Y representó un revés -y hasta un papelón- para Meloni, que considera los centros construidos por primera vez en el exterior, es decir, el “modelo Albania”, una de sus grandes apuestas para contrarrestar la inmigración ilegal.

En este clima de lo más ríspido entre el oficialismo y el Poder Judicial, acusado de ser ideológico y de querer ponerle los palos en las ruedas a Meloni, el domingo el diario Il Tempo -de derecha- puso más leña al fuego. Publicó un mail que un juez de Casación, Marco Patarnella, les escribió a sus colegas tiempo atrás, criticando la reforma judicial que impulsa el gobierno, que contenía frases incendiarias: “Meloni no tiene investigaciones judiciales en su contra, por lo tanto, no se mueve por intereses personales sino por visiones políticas y esto la hace mucho más fuerte, pero también más peligrosa”.

Ese correo electrónico “shock” fue relanzado por Meloni en sus redes sociales, pero titulado como “Meloni hoy es un peligro más fuerte que Berlusconi, debemos ponerle remedio”, algo que generó aún más tensión.

Mientras que hubo pedidos de interrogación parlamentaria de los partidos del oficialismo, Giovanni Donzelli, referente de Hermanos de Italia, salió a asegurar que “las togas rojas no nos van a detener”.

“Meloni es un problema para ellos porque no es chantajeable y quiere reformar la justicia”, sumó.

La líder de la oposición, Elly Schlein, del Partido Democrático, acusó a Meloni de hacerse la víctima y el presidente de la Asociación Nacional de Magistrados, quiso dar explicaciones: “Ningún magistrado ni la ANM jamás dijeron que querían ponerle remedio a la acción de la premier; no buscamos ninguna contraposición con el poder ejecutivo, sino que vivimos una gran preocupación por los ataques dirigidos a algunas oficinas judiciales sólo por el hecho de haber tomado una decisión según la ley y el derecho”, indicó.

“Meloni es indefendible sobre el centro de migrantes en Albania: tiró sin lógica mil millones de euros, le quitó dinero a los enfermeros, a los obreros, a los policías para hacer propaganda… Pero los magistrados ideologizados que atacan a la premier se equivocan como ella y más que ella, porque así le hacen el juego y ella se puede hacer la víctima, en lugar de responder por el derroche de dinero público”, comentó, por su parte, el expremier, Matteo Renzi, de Italia Viva, en X.

En este clima, Meloni aprobó esta tarde, en un puñado de minutos, por decreto, una nueva ley con una lista de países seguros. El objetivo es limitar al máximo cualquier interpretación de los jueces y darle marco jurídico al tan cuestionado pacto Italia-Albania para evitar, así, que los flamantes centros de Shengjin y Gjade, su gran apuesta, se queden vacíos.

Conforme a los criterios de

Los comentarios están cerrados.