Precios Justos: llegan nuevas listas con remarcaciones de hasta el 50% tras el triunfo de Milei
En el primer día hábil tras el triunfo de Javier Milei en el balotaje, los supermercados advierten que les llegaron nuevas listas de precios con fuertes aumentos, de hasta 50% en productos que integran Precios Justos. Desde la Secretaría de Comercio, que conduce Matías Tombolini, convocaron de urgencia para este martes a proveedores, mayoristas y cadenas para recordar que el programa, que establece un tope a las alzas del 5% mensual, está vigente hasta el 10 de diciembre, y recordaron que "no hay ningún motivo para la corrida".
Para evitar desbordes, Tombolini autorizó subas mayores en un esquema gradual del siguiente modo: un 5% a partir de este martes y otro 8% el próximo 4 de diciembre para los productos básicos. Y para el resto del surtido, un 12% ahora y otro 8% a inicios del mes próximo. A esto habría que sumarle el 5% que comenzó a regir el 1 de noviembre, confirmaron fuentes oficiales y del sector privado.
Desde el supermercadismo señalaron que recibieron en el día de hoy listas con subas de entre 9 y 50% en artículos de consumo básico de varias marcas lideres, y que cortaron las entregas de mercadería de golpe. Dijeron también que mantendrían una reunión virtual esta mañana con Tombolini, la primera después del balotaje de este domingo, que consagró al candidato libertario como presidente por los próximos 4 años. Allí les notificó del descongelamiento parcial que regirá hasta el recambio presidencial.
Según fuentes del sector privado, el secretario de Comercio, un alfil del ministro de Economía, Sergio Massa, había acordado a fin de mes con la industria de consumo masivo mantener el "sendero de precios" del 5% hasta el día 21 de noviembre (hoy), y se comprometió a revisar ese porcentaje para lo que resta del año a cambio de garantizar el abastecimiento de productos hasta las elecciones presidenciales.
Lo cierto es que Precios Justos venía con problemas de faltantes en varias categorías. El último acuerdo se logró con muchas dificultades. Incluso muchas empresas acordaron de palabra y eludieron el compromiso de firmarlo. Los proveedores elevaban sus quejas por el retraso de precios frente a la escalada inflacionaria de agosto (12,3%), setiembre (12,7%) y octubre (8,4%).
"Hay una serie de reuniones con empresas para tener información directa, para ver cómo está el tema de abastecimiento y de precios. La prioridad para Comercio es cuidar que el producto esté en góndola. La intención es escuchar cuál es la situación real, para evitar una situación de corrida y que la transición sea lo más ordenada posible. Porque no hay elementos, ni subas salariales ni del dólar, ni nada que justifique aumentos del 40%", dijo una fuente oficial a Clarín.
No obstante, en las grandes cadenas atravesaron por distintas situaciones desde las PASO en adelante, es decir, desde el mes de agosto. Distintos fabricantes de productos de consumo básico venían advirtiendo por el retraso de precios por la suba de costos y los topes para aumentar del programa Precios Justos. Los últimos acuerdos fueron más resistidos, a pesar de la compensación que ofreció el Gobierno (beneficios fiscales e impositivos) como compensación.
De hecho, la gran mayoría de las empresas líderes del sector acordaron de palabra, rechazaron firmarlo por consejo de sus áreas legales para no quedar expuestos a eventuales juicios en el fuero tributario penal. En los días previos a las elecciones generales del 22 de octubre, fueron notorios los faltantes en muchos productos básicos, por la alta demanda y porque "los fabricantes cuotificaron las entregas".
Para evitar eso, Tombolini permitió adelantar la suba del 5% a principios de mes, cuando lo habitual era que se efectuara cerca del 15. En las cadenas advirtieron que el Gobierno buscaba que se repitiera en los supermercados una situación similar a lo ocurrido en las estaciones de servicio poco antes de los comicios generales.
El programa vigente es la continuidad del plan antinflacionario de Massa, en el que hoy participan 330 compañías. Abarca un universo de 50.000 productos de rubros tan diversos como consumo masivo (alimentos, bebidas, tocador y limpieza), indumentaria, calzado, electrónicos, motos, insumos industriales y materiales para la construcción.
Los principales protagonistas son los supermercados, que se comprometieron a no aceptar aumentos por encima de la pauta oficial. Por tal motivo, "muchos proveedores dejaron de vendernos", se lamentó una fuente del sector. De allí la falta de muchas marcas líderes y de segundas marcas en las góndolas del canal que hoy concentra el 40% de las ventas de artículos básicos (alimentos, bebidas, tocador y limpieza).
Pero según las cadenas, en los últimos 12 meses se "relanzaron" 8.000 productos para evitar los controles de la Secretaría de Comercio. Una cifra absolutamente ilógica incluso para una economía floreciente. Mucho menos para la crisis que atraviesa la Argentina. Un artículo "nuevo" zafa del control porque no registra precios anteriores. El valor inicial lo establece libremente el fabricante, sin necesidad de violar ningún acuerdo preestablecido.
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