MOSCÚ.- El Parlamento de Ucrania canceló una sesión programada para el viernes mientras el país aumentaba la seguridad después de que Rusia desplegó el jueves por primera vez un misil balístico hipersónico de alcance intermedio que amenaza con escalar la guerra que empezó hace casi tres años.
El presidente ruso Vladimir Putin anunció el jueves el lanzamiento de este misil de alcance intermedio como respuesta directa al uso por parte de Kiev de misiles de mayor alcance provistos por Estados Unidos y Gran Bretaña. Moscú ya había advertido que el empleo de este armamento, capaz de alcanzar zonas más profundas del territorio ruso, provocaría una fuerte reacción.
La OTAN y Ucrania celebrarán conversaciones de emergencia el próximo martes, dijo la alianza, tras una solicitud de Ucrania. La reunión se llevará a cabo a nivel de embajadores y es muy probable que aborde la nueva amenaza del misil.
El Kremlin afirmó el viernes que no tiene “ninguna duda” de que Estados Unidos “entendió” la advertencia de Putin tras el ataque ruso a Ucrania con un misil capaz de transportar ojivas nucleares.
“No tenemos ninguna duda de que la actual administración de Washington ha tenido la oportunidad de familiarizarse con este anuncio y lo entendió”, dijo a los periodistas el vocero del Kremlin, Dmitri Peskov, un día después del disparo del misil nuevo contra Dnipro, en el centro-este de Ucrania.
Esto es lo que se sabe sobre este misil balístico “experimental” qué escaló el conflicto y por qué genera tanta preocupación en Occidente:
El misil disparado por Rusia tiene un diseño basado en el RS-26 Rubezh, un misil balístico intercontinental (ICBM) de largo alcance desarrollado por Moscú. Sin embargo, esta versión es un misil balístico de alcance intermedio (IRBM) y, según el Pentágono, su uso en el campo de batalla es experimental.
Funcionarios norteamericanos indicaron que Rusia probablemente dispone de muy pocas unidades de este tipo. Aunque el misil llevaba una ojiva convencional, advirtieron que puede ser modificado para transportar ojivas nucleares si Moscú así lo decide. “Es un sistema que puede ser adaptado para portar ojivas convencionales o nucleares”, explicó Sabrina Singh, vocera del Pentágono.
El uso de este misil tiene implicancias estratégicas. Según The Guardian, fuentes norteamericanas y británicas indicaron que creían que el misil disparado en Dnipro era un misil balístico experimental de alcance intermedio (IRBM) con capacidad nuclear, que tiene un alcance teórico inferior a 35500 km. Esto es suficiente para llegar a Europa desde donde fue disparado, en el suroeste de Rusia, pero no a Estados Unidos.
La fuerza aérea ucraniana dijo inicialmente que el misil era un ICBM. Aunque el lanzamiento de un IRBM enviaba una señal menos amenazadora, el incidente podía hacer saltar las alarmas y Moscú avisó a Washington poco antes del lanzamiento, según funcionarios norteamericanos.
Putin señaló que este desarrollo responde al despliegue de misiles norteamericanos en Europa previsto para 2026. “El RS-26 siempre fue un candidato principal para este tipo de sistema”, comentó Jeffrey Lewis, experto en no proliferación del Middlebury Institute of International Studies.
Timothy Wright, del Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, afirmó a The Guardian que el desarrollo de nuevos misiles por parte de Rusia podría influir en las decisiones de los países de la OTAN sobre qué sistemas de defensa antiaérea adquirir y qué capacidades ofensivas perseguir.
Una nueva base norteamericana de defensa contra misiles balísticos en el norte de Polonia ya ha provocado airadas reacciones de Moscú. La base norteamericana de Redzikowo forma parte de un escudo antimisiles más amplio de la OTAN y está diseñada para interceptar misiles balísticos de corto y medio alcance.
Sin embargo, Putin afirmó que el lanzamiento del nuevo IRBM el jueves no era una respuesta a la base de Polonia, sino a los recientes ataques ucranianos de largo alcance dentro del territorio ruso con armas occidentales.
Tras la aprobación de la administración del presidente Joe Biden, Ucrania atacó Rusia con Atacms de fabricación norteamericana el 19 de noviembre y con misiles Storm Shadow británicos y Himars de fabricación norteamericana el 21 de noviembre, dijo Putin.
Putin confirmó el ataque a una instalación militar ucraniana con el misil, al que llamó “Oreshnik” (la avellana). Según el mandatario, el disparo fue una respuesta al plan de Estados Unidos de producir y desplegar misiles de alcance medio y corto en Europa y Asia. “Responderemos de manera decisiva y simétrica ante cualquier escalada”, advirtió en un mensaje televisado.
El Kremlin informó que el ataque tuvo como objetivo una empresa de defensa y tecnología de misiles en la ciudad ucraniana de Dnipro, específicamente Pivdenmash, conocida por los rusos como Yuzhmash.
Putin declaró que Rusia estaba desarrollando misiles de corto y medio alcance en respuesta a la producción y posterior despliegue previsto por Estados Unidos de misiles de medio y corto alcance en Europa y Asia.
“Creo que Estados Unidos cometió un error al destruir unilateralmente el tratado sobre la eliminación de misiles de alcance intermedio y de menor alcance en 2019 con un pretexto descabellado”, dijo el presidente ruso, refiriéndose al tratado sobre las fuerzas nucleares de alcance intermedio (INF).
Estados Unidos se retiró formalmente del tratado de 1987 con Rusia en 2019 tras afirmar que Moscú estaba violando el acuerdo, una acusación que el Kremlin negó.
Agencias AP, AFP y Reuters
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