una ministra reclama hablar con el gobierno de Milei
El gobierno de Luis Arce busca internacionalizar la nueva tensión con la administración de Javier Milei por el anuncio de la localidad salteña de Aguas Blancas de que construirá un alambrado de 200 metros para impedir el paso de migrantes bolivianos a la Argentina, en el marco de un plan nacional contra el narcotráfico, el contrabando y otros delitos en la frontera con ese país.
Luego del comunicado de rechazo de la cancillería vecina de este lunes, ahora es la ministra de la Presidencia de Arce, María Nela Prada la que advirtió que en primer lugar habrá una comunicación de su Cancillería con su par en Argentina (los ministros son Celinda Sosa y Gerardo Werthein) sobre este reclamo por el cerco que, según el gobierno boliviano “viola tratados internacionales”.
La Paz ahora busca un entendimiento entre los dos presidentes que en realidad, no sólo no hablan sino que se mantienen en estado de absoluta tensión.
Del lado argentino, en cambio, no sólo apoyan el alambrado, sino que lo promueven y son indiferentes al reclamo boliviano que, por cierto apunta contra un cerco que está del lado argentino y no del lado boliviano.
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Adorni, sobre el alambrado en la frontera con Bolivia
Para el caso, la ministra de Seguridad Patricia Bullrich.que incrementarán los controles en los pasos fronterizos con Brasil.
“Ahora vamos a ir a la frontera en Misiones con Brasil, que es una frontera que se pasa caminando en muchos lugares, quee hemos tenido sicariatos y problemas. Vamos a una triple frontera entre Chaco, Paraguay y Salta, que es compleja donde se entra al Impenetrable”, adelantó en diálogo con radio Mitre.
que ayer, en diálogo con Clarín y luego a través de un mensaje en X defendió la decisión del intendente de Aguas Blancas, Adrián Zigarán de levantar un alambrado que va desde desde la terminal de micros hasta los puestos de control del Puerto de Chalanas, en la población de Aguas Blancas, fronteriza con Bolivia. Sólo entre Salta y Bolivia hay más de 770 kilómetros de frontera. Zigarán, que responde al gobernador Gustavo Sáenz, incluso publicó la licitación para construir la valla en el Boletín Oficial municipal y fue respaldado por el mandatario provincial y por la ministra Bullrich.
Todos adujeron que, aunque no está escrito en la letra del llamado Plan Güemes es parte de este. El Plan Güemes fue lanzado por la ministra y el gobernador en diciembre pasado: Prefectura, Gendarmes y efectivos de la Policía Federal enviaron 310 efectivos para redirigir y “ordenar” esa situación vigilando las aguas del fronterizo río Bermejo.
El lunes a la noche, Saez volvió a explicar que lo apoya y que buscará ordenar un punto fronterizo para a los migrantes que ingresan sobre todo con mercadería y evitan el paso por Migraciones. Es decir, no muestran lo que llevan. Habría que preguntarle a la Gendarmería cómo hacen esos controles. Este martes, Bullrich volvió a apoyarlo por LN+.
Qué dicen en Bolivia
Así como Arce apoyó la candidatura de Sergio Massa a la presidencia de la Argentina, Milei siempre lo defenestró por ser de izquierda y hasta lo acusó de una supuesta intentona golpista a en 2024.
Tampoco hay diálogo hoy entre las cancillerías desde la salida de Diana Mondino. El canciller Gerardo Werthein, que se tomó unos días de descanso para luego hacer su gira a Israel, todavía no definió la nueva estructura del ministerio y de quién se hará cargo del área Latinoamericana y, por lo tanto de las relaciones con Bolivia. Hay diálogo a nivel embajadores. Argentina tiene en La Paz al diplomático Marcelo Masoni.
Ante ciertas burlas por las mínimas dimensiones del alambrado y el contexto en que se va a levantar, el interventor de Aguas Blancas le dijo a el diario El Tribuno: “No es el muro de Trump, es un alambrado para ordenar”.
Y manifestó que la gente no pasaba por migraciones por “una cuestión cultural” para evitar controles migratorios donde se pagan 500 pesos por persona y entonces optan por pasos clandestinos. Zaravian considera que el alambrado busca evitar esto. “Por esas casas cobran 500 de ida y 500 de vuelta, y ahí es donde se arma el lío, porque además de pasar de forma ilegal denuncian a los gendarmes y prefectos”, relató.
El gobierno de Arce, que busca regionalizar el conflicto por los 200 metros de alambrado ya estaba enojado ya con Sáenz porque porque le empezó a cobrar a los bolivianos que pasan la frontera para atenderse con la medicina estatal argentina, algo que los bolivianos hicieron siempre con los argentinos.
Para la Argentina siempre fue un problema porque son muchos más los bolivianos que llegan a atenderse gratuitamente en lo establecimientos locales que viceversa. El mismo problema había enfrentado el ex gobernador de Jujuy, Gerardo Morales.
A nivel nacional, las relaciones se tensaron más después de que Patricia Bullrich denunció en abril de 2024 la supuesta presencia de ramas armadas de iraníes en territorio boliviano, cerca de la frontera con Argentina. Y también con los dichos del presidente Milei sobre Arce a quien desprecia por ser de izquierda y a quien acusó de intentar un autogolpe. Por otro lado, en la campaña electoral argentina, el presidente boliviano apoyó la candidatura de Sergio Massa.
“Yo soy partícipe y activista por una ciudadanía mundial donde no exista muros ni vallas que nos separen. Las fronteras han generado divisiones entre hermanos de un mismo territorio. Somos lo mismo en muchas fronteras, lamentablemente en muchos países se aplican políticas que ahondan divisiones”, dijo la ministra de la Presidencia de Bolivia mientras que el ministro de Justicia, Cesar Siles apuntó al derecho internacional.
“Consideramos que el mandato del presidente de Argentina es vulneratorio de los principios más elementales de la convivencia pacífica en el nivel internacional. Esto iría en contra de los tratados internacionales”, afirmó y anunció la elaboración de un manifiesto en contra de la iniciativa para que haya pronunciamiento de los organismos internacionales.
“Tanto Naciones Unidas y la Organizaciones de Estados Americanos deberían conminar estas determinaciones, esperamos que solo sea un anuncio y no algo real. Esperemos que el presidente de Argentina pueda reflexionar”, aseveró.
Al mismo tiempo, en Bolivia y Argentina existe un Comité binacional de Frontera que trabajo en varios acuerdos. La construcción de la valla no fue oficializada en esa entidad. Pero a decir verdad, está del lado argentino.
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